El sector construcción continúa consolidando su recuperación en el Perú. De acuerdo con el informe presentado por la Cámara Peruana de la Construcción (CAPECO) y difundido por El Peruano, la actividad constructora mantiene su ritmo de expansión al cierre de setiembre de 2025, acumulando cuatro trimestres consecutivos de crecimiento. Este comportamiento positivo responde, principalmente, al dinamismo de la inversión pública, la reactivación de los proyectos de vivienda y la mejora de la confianza empresarial.
CAPECO destacó que el incremento de la inversión pública ha sido determinante en la consolidación del sector, con un crecimiento cercano al 6 % en comparación al mismo periodo del año anterior. Obras de infraestructura vial, saneamiento y equipamientos urbanos continúan siendo los principales motores de este impulso, sumado al avance de grandes proyectos de vivienda social que dinamizan la cadena productiva de materiales y servicios.
El segmento inmobiliario también ha mostrado señales de recuperación, especialmente en la vivienda de interés social, apoyada por una mayor disponibilidad de créditos hipotecarios y programas estatales que facilitan el acceso a financiamiento. Este contexto ha permitido que las empresas desarrolladoras y constructoras retomen la ejecución de proyectos que se mantenían en pausa, generando empleo y reactivando la demanda de materiales de construcción.
Para proveedores y subcontratistas, este panorama representa una oportunidad clave para fortalecer su posicionamiento en el mercado. El aumento en la ejecución de obras públicas y privadas incrementa la demanda de insumos, maquinaria, equipos y soluciones tecnológicas. En este escenario, la digitalización y la presencia en plataformas especializadas, como Constructivo, se vuelven herramientas estratégicas para conectar con nuevos clientes y proyectos de gran escala, especialmente en el ámbito minero e industrial.
No obstante, CAPECO advierte que persisten desafíos estructurales que podrían ralentizar el ritmo de expansión en los próximos meses, como los retrasos en algunos proyectos públicos, la incertidumbre política y las limitaciones presupuestales. Frente a ello, se recomienda mantener una gestión financiera prudente y diversificar la cartera de clientes para asegurar la sostenibilidad operativa.
La consolidación del sector construcción al cierre de setiembre reafirma su papel como motor del desarrollo económico nacional. La combinación de inversión pública, innovación tecnológica y fortalecimiento del ecosistema proveedor será determinante para sostener el crecimiento en 2026, en un entorno que exige eficiencia, competitividad y adaptación digital.
FUENTE : CONSTRUCTIVO
